El Feng Shui es una filosofía oriental basada en encontrar el equilibrio y aportar energías positivas a tu casa o lugar de trabajo. Feng Shui significa “Viento y Agua”, hace referencia al movimiento Chi (flujo vital de energía) que está presente en todo. La buena circulación del Chi propicia salud, prosperidad y una vida armoniosa.
Vaciar, ordenar y limpiar:
El orden y la limpieza es el punto de partida del Feng Shui. Deshazte de lo que no necesitas, vacía y haz limpieza; con ello conseguirás que la energía fluya adecuadamente.
Recibidor:
El objetivo del Feng Shui es crear un ambiente positivo y armonioso que mejore la vida de sus ocupantes. Entrar con buen pie en casa es importante.
El recibidor debe dar sensación de espacioso, elige colores luminosos como el blanco o cremas.
Decora tu recibidor con elementos que te transmitan energía positiva como flores, velas o fotos. Pon Un cuadro bonito y alegre, una alfombra, una luz cálida pero intensa y una plantita te acogerán a tu regreso a casa.
Otro consejo es que no pongas espejos frente a la puerta, ya que la energía rebota y se escapa.
Salón:
Es uno de los espacios con más energía. Para crear un ambiente que propicie la energía positiva debes tener en cuenta algunos aspectos:
Debe ser un espacio con luz natural. La luz aporta la energía del elemento fuego. Presta atención a su ventilación. Ventila el espacio cada día. No pongas el sofá de espaldas a la puerta. Utiliza materiales nobles como la madera y tejidos naturales.
Utiliza una combinación de colores equilibrada que facilite la circulación del Chi. Combina puntos de luz ambiental y puntual para activar el Chi.
El salón es el lugar destinado a la comunicación y para favorecer el diálogo relajante, el color indicado es el azul. Para un diálogo más vivaz, los colores preferidos son el naranja y el rojo. El naranja estimula la alegría y el rojo ayuda a levantar el ánimo. Puedes poner cojines o algún elemento de decoración de estos colores.
Complementa la decoración con plantas naturales.
Cocina:
Según el Feng Shui, la cocina es el corazón de la casa.
Los materiales ideales en la cocina son: la madera (alimenta el fuego) combinado con el metal (aportan el elemento Tierra). Incorpora plantas aromáticas para potenciar una energía fresca y vibrante.
Si la cocina es totalmente blanca añádele colores fuego y tierra complementos en amarillo, naranja, rojo o verde. El color ideal para la cocina es el amarillo, ya que es un color solar que da vigor y energía, además de favorecer la digestión.
Baño:
La organización y distribución del baño con el Feng Shui es fundamental dado que el agua simboliza el dinero, la fortuna o la salud. Y es por donde se escapa la energía positiva de nuestra casa.
Se recomienda mantener siempre la puerta cerrada del baño, los desagües y la tapa del inodoro.
Para equilibrarlo, utiliza la madera, es la gran aliada del Feng Shui, con ella equilibras la energía del tu baño. Complementa tu baño con plantas.
En el baño se utilizan preferentemente los fríos: azul, turquesa y verde claro. Son refrescantes y relajantes porque recuerdan el agua. Si el ambiente resulta un poco triste, se puede crear contraste con tonalidades más vivas en los objetos de decoración.
Dormitorio:
El Feng Shui enfatiza la importancia del descanso en el dormitorio, es un espacio donde la energía vital Chi debe fluir correctamente.
La posición de la cama es muy importante para tu sueño; el cabecero debe situarse junto a la pared y no junto a la ventana. Ello te ayudará inconscientemente a tener mayor sensación de seguridad mientras duermas. Las mesitas de noche y las lámparas son perfectas para obtener protección a ambos lados, aunque no hace falta que sean idénticas.
El dormitorio debe convertirse en una invitación al descanso con colores sutiles. Crea un rincón de lectura o relax, enciende incienso o pon una vela y déjate llevar por las sensaciones.
En el dormitorio los colores deben ser suaves y relajantes, ni muy fríos ni muy cálidos, tipo pastel.
La magia de los detalles:
Las plantas: Las plantas son un elemento clave en el Feng Shui, ya que son fuente de vitalidad y energía; te permiten renovar el aire y eliminar la contaminación. Es importante que elijas aquellas plantas que vayan con consonancia con el resto de la decoración de tu estancia.
Cualquier tipo de planta tiene la capacidad aportar oxígeno, pero además limpia tu casa de malas energías
Las plantas “más” Feng Shui son las orquídeas, el bambú, el jazmín, los crisantemos y el pino. Una de las plantas más recomendada es la planta jade, ya que es muy fácil de mantener, pide poco cuidado y además la asociamos con la prosperidad. Puedes poner plantas en todas las estancias que tengan luz natural e incluso en los dormitorios.
Te animamos a poner plantas en tu hogar, absorben muy bien la energía y ayudan a generar un clima fantástico en casa.
Agua: Es muy importante según el Feng Shui ya que atrae la prosperidad. Si tienes un jardín o terraza grande, no lo dudes, pon una fuente.
Velas: En el Feng Shui las consideran propietarias del elemento fuego, ya que tienen la fuerza necesaria para expulsar o cambiar cualquier energía que influya negativamente en el ambiente.
Lampara de sal: Coloca una en el salón, el pasillo, el recibidor o en tu dormitorio. La lampara de sal, tiene numerosos beneficios gracias a que absorben gran parte de las ondas electromagnéticas presentes en el hogar y emiten iones negativos que son positivos para nuestra salud. Además, aporta una iluminación cálida, similar a las velas, lo que crea un ambiente idóneo para relajarse.
Otros detalles llenos de magia son los cojines, alfombras y cerámica.
Los detalles y complementos tienen un gran valor en esta filosofía, ya que son los encargados de generar alegría y positividad. En el Feng Shui se valora mucho la presencia de flores frescas. También es muy importante a los olores de tu hogar; ya que ello influye en tu estado de ánimo. En Benicek, te proponemos unas sinergias de 9 aceites esenciales que te ayudaran a armonizar y equilibrar tu hogar.
Ya sabes: si cuidas de tu casa, tu casa cuidará de ti.